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El Parlamento Europeo aprueba adaptar la directiva del IVA a la era digital

La actualización obligará a pagar el impuesto por los servicios prestados a través de plataformas en línea

La Comisión calcula que la medida permitirá a los estados miembro ingresar 11.000 millones en la próxima década

La UE acuerda que plataformas digitales recauden IVA en casos específicos

El IVA para el comercio online internacional se aplicará en el país de destino

Fachada del Parlamento Europeo en Estrasburgo EFE/Patrick Seeger

Claudia T. Ferrero

Madrid

El pasado miércoles 12 de febrero, tuvo lugar la sesión plenaria del Parlamento Europeo en la que los eurodiputados aprobaron la actualización de las normas del IVA, con un total de 589 votos a favor, 42 en contra y 10 abstenciones, tras más de ocho años de preparación documental. Esta modificación ha sido votada en un contexto marcado por las últimas declaraciones del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, en las que comparaba la imposición arancelaria estadounidense al IVA europeo, calificando el impuesto al consumidor como un arancel hacia los productos estadounidenses.

Los cambios a introducir en la directiva del IVA exigen su pago por las plataformas en línea por los servicios prestados en ellas, cuando no hayan sido cobrados por los proveedores de servicios individuales. De esta forma, se pondría fin a la distinción entre los servicios similares prestados por empresas no en línea a los desempeñados en plataformas online, al estar los primeros sujetos al IVA desde el inicio, lo que elimina la distorsión del mercado en el marco de la economía tradicional.

Además, su contenido incluye la completa digitalización de las obligaciones de declaración del IVA para las transacciones transfronterizas. De modo que, las empresas que realicen dicho tipo de transacciones con otras empresas recurrirán a la emisión de facturas electrónicas, así como a la automática notificación de los datos a la correspondiente administración tributaria. Con ello, se intenta mejorar la posición de las autoridades tributarias en la lucha contra el fraude del IVA. Por otro lado, al objeto de simplificar la carga administrativa de las empresas con mayor número de actividad transfronteriza, las normas refuerzan las ventanillas únicas de IVA en línea para que estas cumplan sus obligaciones mediante un portal e idioma único.

Los sectores donde mayor incidencia presenta la actualización de la directiva son el del alquiler de alojamientos de corta duración y el sector del transporte de pasajeros por carretera. No obstante, los Estados miembros podrán eximir de la norma a la pymes, tal y como había planteado el Parlamento previamente.

Finalmente, lo cálculos de la Comisión estiman una recuperación de hasta 11.000 millones de euros en IVA para los Estados miembros durante los próximos diez años. De esta forma, las empresas ahorrarán 4.100 millones de euros al año en costes de cumplimiento y 8.700 millones de euros en costes de registro y administrativos, durante los mismo diez años.

El proyecto aprobado modifica la Directiva del IVA de 2006

El 8 de diciembre de 2022, la Comisión presentó el paquete «El IVA en la era digital», propuesta legislativa en el que constaba la actualización de la directiva sobre el IVA de 2006 como una de las tres propuestas a realizar. Entre estas estaban la modernización de las obligaciones declarativas en materia de IVA introduciendo las obligaciones digitales; la aceptación de los desafíos de la economía de las plataformas, particularmente, a través de la regla general de facturación electrónica para la emisión de factura; y la introducción de un registro único del IVA para toda la UE, con el fin de evitar la necesidad preexistente de registro múltiple.

Una de las razones que motivaron la propuesta de cambio fue la pérdida de los Estados miembros de la UE de 93.000 millones de euros en ingresos por IVA, cifra estrechamente vinculada con los intercambios intraeuropeos, específicamente, con la falta de adaptación a la era digital de las reglas del IVA, en vigor después de 30 años para los intercambios transfronterizos. De este modo, se recurrió al empleo de la tecnología para reducir las cargas administrativas y los costes conexos de las empresas en la lucha contra el fraude fiscal. Para ello la Comisión, en el contexto de su plan para una fiscalidad simple y equitativa, anunció dicho paquete legislativo -«Las normas del IVA en la era digital»-, que incluía la propuesta de modificación de la Directiva del IVA de 2006.

Tres años más tarde, el 17 de enero de 2025, la Comisión de Asuntos Económicos y Monetarios adoptó el informe sobre el proyecto de Directiva del Consejo por la que se modifica la Directiva de 2006, en lo relativo a las normas del IVA adaptadas a la era digital.

De este modo, la actualización aprobada por el Parlamento Europeo el 12 de febrero deberá ser aplicada con un límite de tiempo máximo de cinco años, lo que supone su efectiva adaptación de aquí a 2030.

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