El sueño de los «All Whites»
I. T.
RUSTEMBURGO. Pusieron contra las cuerdas a Italia en el reciente amistoso de Pretoria pero los «All Whites» son, probablemente, el combinado más flojo de la Confederaciones. Nada que ver con los temibles «All Blacks» del rugby. Sin adversarios de cierto rango en su zona, ya que Australia compite ahora por Asia, el objetivo de Nueva Zelanda es acumular experiencia y prepararse para la repesca por la única plaza del Mundial que tiene en juego Oceanía.
Tres veces campeones continentales, los «kiwis» -así apodados en referencia a un ave autóctona, no a la fruta- se clasificaron tras superar a Fiji, Nueva Caledonia y Vanuatu. Se presentan con la base del equipo que disputó los Juegos Olímpicos, pero sin su gran capitán, el defensa del Blackburn Rovers Ryan Nelsen, lesionado.
Formada en su mayoría por futbolistas de la liga local, a años luz del nivel europeo, Nueva Zelanda se encomienda a Chris Killen, delantero propiedad del Celtic de Glasgowm, que anotó dos de los tres goles ante los italianos enel último amistoso. Smeltz, el otro artillero, podría ganarse aquí el «amor» del algún directivo europeo. Componen una selección tan desvalida que tuvieron que recurrir, para confeccionar la lista, a Vicelich, ya retirado. Cuatro de sus elegidos actúan en Estados Unidos, dos en Escocia, y uno en Inglaterra, Grecia y Finlandia, pero les conocen en casa y a la hora de comer.
Disputan su tercera Confederaciones y sueñan con sumar su primer punto en el torneo. En sus seis partidos anteriores, en las ediciones de 1999 y 2003, dos goles a favor y 17 en contra. Fueron los primeros en llegar a Suráfrica. Su preparación se vio perjudicada a principios de mes por un virus estomacal que afectó a varios futbolistas.
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