Una década con Podemos: auge y caída en diez momentos del partido que reventó el bipartidismo
La organización fundada por Iglesias, hoy en manos de Belarra, sopla diez velas. En los últimos meses han vivido alguno de los episodios más dolorosos de su historia. De acariciar el 'sorpasso' al PSOE a convertirse en un partido casi residual
Sumar toma forma para un futuro sin Podemos
El pánico a la irrelevancia que tiene la dirección de Podemos, hoy en manos de Ione Belarra, de línea continuista con el liderazgo del fundador Pablo Iglesias, motivó en diciembre que rompieran su alianza con Sumar y anunciaran la candidatura de ... Irene Montero a las elecciones europeas. El partido de los profesores universitarios celebra su décimo aniversario enfangado en una batalla cainita contra sus propias escisiones, que se alimentan del espacio político y electoral que Podemos desbrozó.
En los últimos meses, Belarra y su equipo han vivido alguno de los episodios más crudos de su historia. A continuación, auge y caída en diez momentos del partido que reventó el bipartidismo. Desde acariciar el 'sorpasso' al PSOE, alcanzar 69 diputados en sus primeras elecciones generales y años después formar parte de un Gobierno de coalición, a pelear con cinco «partisanos» desde el Grupo Mixto contra la intrascendencia.
1
2014
Fundación del partido
El 17 de enero de 2014, hace ya diez años, el profesor universitario y conocido de las tertulias políticas televisivas, Pablo Iglesias, presentó en el Teatro del Barrio, del madrileño barrio de Lavapiés, una plataforma que se llamó Podemos. En el escenario estaban también Íñigo Errejón, Carolina Bescansa, Juan Carlos Monedero y Teresa Rodríguez, cofundadores. Todo estaba por construir porque Podemos no tenía ni estructura y solo era una declaración de intenciones que recogía el malestar del 15M contra la «casta» de los partidos tradicionales. Sus portavoces ya trabajaban en configurar una candidatura de izquierdas con un discurso de regeneración democrática. Quedaban cinco meses para las elecciones europeas.
2
Pablo Iglesias, eurodiputado español de Podemos, interviene en la sesión plenaria del Parlamento Europeo en Estrasburgo (Francia) el 1 de julio de 2014
2014
Cinco escaños en Europa
Las encuestas para las elecciones europeas del 25 de mayo de 2014 barruntaban para Podemos hasta dos escaños en el Parlamento Europeo, un resultado que ya era muy halagador para una plataforma que todavía no se había consolidado y que tenía escasos meses de vida. La papeleta tenía la cara de Pablo Iglesias, idea de Íñigo Errejón. Y con 1.253.837 caras de Iglesias en las urnas lograron cinco eurodiputados, un 7,97 por ciento de los votos. La sorpresa fue mayúscula. El siguiente reto eran las generales.
3
2014
«El cielo no se toma por consenso; se toma por asalto»
En octubre de 2014 se celebró la asamblea constituyente 'Sí Se Puede' en el Palacio de Vistalegre de Madrid. Esto es, el congreso fundacional donde Podemos se convirtió en un partido con estructura, órganos, programa y estrategia. Al final de su famoso discurso, ante 8.000 personas, el flamante líder de Podemos, Pablo Iglesias, pronunció una de sus frases más icónicas y simbólicas: «El cielo no se toma por consenso; se toma por asalto». El partido se preparaba para el ciclo electoral de 2015.
4
2015
Cinco millones de votos
En 2015, entraron en los parlamentos autonómicos. Pero no se presentaron a las municipales porque no tenían suficiente capilaridad territorial -su talón de Aquiles-. El partido se centró en las generales del 20-D. En febrero de 2015, ABC publicó que el Barómetro del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS) situaba a Podemos en segunda posición por encima del PSOE. Un 27,3 por ciento al PP, un 23,9 por ciento a Podemos y un 22,2 por ciento al PSOE. En las generales de 2015, entraron en el Congreso con 69 escaños, 5.212.711 votos (20,66 por ciento) y tercera posición. El resultado era histórico y habían logrado romper el bipartidismo.
5
2016
El 'pacto de los botellines'
Fue precisamente el haberse convertido en una amenaza para el PSOE lo que imposibilitó un acuerdo de investidura. Al otro lado del tablero político, Ciudadanos también rivalizaba con el PP. Una investidura no fue posible y se repitieron las generales en 2016. Pero la estrategia de Iglesias de coaligarse con Izquierda Unida no fue el éxito que esperaba. El llamado 'pacto de los botellines', que cerró con Alberto Garzón en un bar de Madrid. Lograron 71 escaños, los mismos que por separado, y perdieron un millón de votos. No todo Podemos estuvo de acuerdo con la coalición: el sector afín a Íñigo Errejón no lo apoyaba. Empezó aquí el declive interno, por las guerras de poder entre familias, y externo, caída electoral tras caída.
6
2017
Batalla de 'Vistalegre II' contra Errejón
En 2017 se celebró la segunda Asamblea para renovar liderazgo. La división en el partido era obvia. Errejón presentó un proyecto diferente al de Iglesias en 'Vistalegre II', pero perdió. Iglesias entendió que la capacidad de movilización del censo de su adversario podía amenazar su liderazgo y, en lugar de echarlo, decidió apartarlo a la Comunidad de Madrid, donde le prometió una libertad que nunca fue real. Errejón abandonó el partido en 2019 y fundó Más Madrid con Manuela Carmena. Más Madrid se comió a Podemos en la Asamblea madrileña y le sirvió a Errejón de plataforma para empezar a construir un proyecto nacional que no cristalizó con Más País pero que sí le está funcionando con Sumar.
7
2018
Moción de censura a Rajoy
Unidas Podemos y Pablo Iglesias jugaron un papel clave al apoyar la moción de censura del PSOE que en 2018 sacó a Mariano Rajoy del Gobierno y situó a Pedro Sánchez a los mandos del Ejecutivo. Era la segunda moción de censura presentada contra Rajoy tras la que había decaído el año anterior de Unidas Podemos. Sin embargo, fue la primera en prosperar de toda la historia de la democracia española gracias al apoyo del grupo parlamentario de Iglesias.
8
2019
Primer Gobierno de coalición
Pablo Iglesias logró entrar en el Gobierno de coalición en 2019 con su peor resultado histórico: 35 diputados, cuarta posición y casi dos millones de votos menos que en su estreno de 2015. Cuando Iglesias dejó su Vicepresidencia para intentar salvar a Podemos en la Comunidad de Madrid, primavera de 2021, designó a dedo a Yolanda Díaz para asumir su cargo en La Moncloa y ser la candidata de Unidas Podemos a presidir el Gobierno. Pero Díaz tenía otros planes: consideraba ya entonces que la marca Unidas Podemos estaba agotada y que había que ir a una reunificación y ampliación de la izquierda alternativa al PSOE que pasaba por quitarle peso a Podemos.
9
2023
Sumar les margina en las listas
Desde que Yolanda Díaz empieza a dejar ver qué planes tiene para Podemos, Iglesias y ella pierden una amistad de años debido a los ataques del exvicepresidente para que su partido no pierda peso dentro de Sumar. Lo mismo ocurre con la relación entre Ione Belarra e Irene Montero y la vicepresidenta Díaz: dejan de hablar en el Consejo de Ministros. Son dos años muy complicados. En verano del año pasado, llegan a un acuerdo después de muchísima tensión y ataques cruzados. Podemos acepta sumarse a la coalición Sumar, pero tiene que tragar con un veto a Irene Montero en las listas electorales y con no estar en los puestos de salida. Logran cinco escaños dentro del grupo parlamentario de Díaz, el peor resultado de Podemos de su historia, y empiezan a denunciar que les marginan y les tienen sometidos sin capacidad de desplegar su acción política.
10
2023
Ruptura con Sumar y lanzamiento de Irene Montero
Los meses de fuertes tensiones entre Díaz y Podemos provocaron el cinco de diciembre la ruptura con Sumar y el salto del partido morado al Grupo Mixto del Congreso. Podemos explicó que el movimiento les garantiza mayor visibilidad y autonomía después de lo que, a su juicio, supuso un ninguneo continuado por parte de Díaz. Unas semanas después, en un acto de rearme en Madrid, la líder del partido, Ione Belarra, anunció que Irene Montero se presentará a unas primarias internas del partido para liderar la candidatura a las elecciones europeas. Quieren garantizar ingresos, dar la batalla electoral a Sumar y aprovechar la circunscripción única para lograr el euroescaño. La debilidad parlamentaria del Gobierno hace además que los cinco escaños de Podemos sean necesarios. El PSOE y Sumar tendrán que negociar con Belarra sí o sí.
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