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Las lluvias no acaban con la escasez: el sur peninsular sufre la sequía más larga en 60 años y Cataluña, la más intensa

El verano de 2023 ha sido el tercero más cálido de la serie histórica, según el balance del verano de la Aemet

El embalse de La Viñuela agoniza a la espera de un otoño lluvioso Efe
Isabel Miranda

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Las lluvias de septiembre no han acabado con el problema de base: España está sumida en una sequía de larga duración. Las cuencas del Guadalquivir y Guadiana sufren la sequía más larga desde que hay registros (1961) y en la cuenca del Pirineo oriental se trata de la más intensa. Todo apunta a que el otoño será húmedo. «Aliviará la situación de sequía, pero para acabar con una sequía de larga duración no bastaría con que fuera lluvioso», ha explicado este jueves el portavoz de la Agencia Estatal del Meteorología (Aemet), Rubén del Campo. El otoño tendría que ser excepcional.

La Aemet ha presentado el balance climatológico del verano, que indica que ha sido el tercero estío más húmedo en lo que llevamos de siglo gracias a las lluvias de junio. Sin embargo, los últimos 12 meses siguen colocando a la Península Ibérica (salvo la cuenca del Tajo) en situación de sequía meteorológica. También si se miden los tres años anteriores (donde solo se salvan las cuencas del Júcar, Segura y Tajo).

Índice de sequía por cuencas de: Guadalquivir, Guadiana, Ebro y Pirineo oriental

En el sur peninsular, «en la cuenca del Guadalquivir y Guadiana, ya se trata de la sequía más larga desde que tenemos registros. Comenzó en 2016«, ha dicho Del Campo. En comparación, la sequía de los 90 duró cuatro años, aunque fue más intensa. Para Cataluña la situación actual sí es la de mayor dureza; y en la cuenca del Ebro, es la segunda peor.

La DANA ha supuesto un alivio en algunas zona y ha mejorado la humedad del suelo, pero no ha acabado con los problemas existentes. Los embalses, por ejemplo, se han mantenido al 37% de su capacidad total. Los últimos datos del Ministerio para la Transición Ecológica muestran que el 14,6% del territorio nacional está en emergencia por escasez de agua y el 27,4%, en alerta.

Tercer verano más cálido

Los datos de la Aemet también sitúan el verano de 2023 como el tercero más cálido de la serie histórica por detrás de los de 2022 y 2003. Hubo un total de 24 días bajo ola de calor (el cuarto estío con más jornadas) y la máxima se registró en el aeropuerto de Valencia, que llegó a 46,8 ºC, que batió el récord de la estación por más de 3 ºC de diferencia.

En 23 estaciones principales la temperatura media del verano fue la más alta de las respectivas series de verano. En 15 la media de las máximas fue también la más alta desde que se tienen registros, y en 29 la media de las mínimas superó al anterior valor más alto de la serie.

Las aguas costeras han registrado temperaturas récord, no solo en verano, sino a lo largo de todo el año. Y ya han superado en medio grado el anterior registro más cálido, correspondiente a 2020.

España va camino de ser un año muy cálido. Con los datos de enero a agosto, 2023 empata con 2022 y 2020 en el primer puesto, con una temperatura media de 15,7 grados.

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