El desconocido pasado televisivo de las grandes estrellas de cine

La mítica serie de Hitchcock fue la puerta de entrada a muchos jóvenes actores que querían triunfar en el mundo del espectáculo. Robin Williams, mucho antes de ser reconocido como uno de los mejores cómicos del cine, participó la alocada serie «Mork y Mindy». Junto a él intervenía Pam Dawber, y durante las cuatro temporadas que duró la serie en la ABC se contaban las aventuras de un extraterrestre que aterriza en una pequeña localidad de Colorado con la misión de estudiar la tierra y comprender a los humanos. En su misión conoce a una chica que le ofrece amistosamente su casa.

Robert Redford, tras su periplo como pintor y bohemio que le llevó como mochilero incluso a España, intervino como episódico en diversas series, como «El Virginiano» (1963), «Los defensores» (1964) o «Situación desesperada» (1965). Otro que dio sus primeros pasos en la tele fue Steve McQueen, mucho antes de que protagonizara en la gran pantalla títulos como «Bullit» o «El caso de Thomas Crown». En «Wanted Dead or Alive», donde interpretó a Randall el justiciero, estuvo en antena en CBS entre 1958 y 1961. Ambientada en el Oeste, se contaba el día a día de un joven cazarrecompensas. Otro que comenzó en la pequeña pantalla fue Clint Eastwood. Lo hizo en «Rawdhide» (1959-1965), donde se narraba la vida de unos vaqueros que trasladaban ganado.

Roger Moore , uno de los más celebrados James Bond del cine, tuvo su bautismo de fuego en el medio televisivo con la serie «El Santo». Se trata de una serie británica emitida entre 1962 y 1969 en la que se contaban los casos de Simon Templar, una especie de Robin Hood moderno. También dio el salto a las series USA con «Maverick», junto a Jack Kelly y Robert Colbert. Otro James Bond cinematográfico ha sido Pierce Brosnan, que hizo sus pinitos en la pequeña pantalla en «Remington Steel». Nick Nolte dioó sus primeros pasos como actor en «Hombre rico, hombre pobre». Su personaje tierno y duro a la vez se metió a la audiencia en el bolsillo en esta serie que en España se emitió en la primera cadena bajo el epígrafe de «Grandes relatos».

Otro rubio que conquistó primero en televisión hasta dar el salto a la gran pantalla fue Ryan O'Neal. Una de sus primeras apariciones fue en «Payton Place». Se trataba de un culebrón made in USA de gran éxito y que estuvo en antena durante 500 episodios. Su popularidad le permitió dar el gran salto interviniendo en varias películas, pero donde dio el campanazo fue con su papel de Oliver Barrett en la lacriómogena «Love Story», que incluso le valió una nominación a los Oscar en la edición de 1970. Hace unos años el actor volvió a sus orígenes enfundándose el mono naranja de preso para el papel de Max Brennan, el padre de la doctora Brennan, la forense protagonista de «Bones».

Woody Harrelson también apareció por primera vez en televisión como camarero en «Cheers», mientras que Benedict Cumberbatch lo hizo en «Sherlock».

Antes que Jack Sparrow se cruzara en su camino y otros muchos títulos le convirtieran en uno de los actores de moda, Johnny Depp hizo sus pinitos en «21 Jump Street», una serie que fue todo un fenómeno juvenil en el que interpretaba el papel de un joven policía que se hacía pasar por estudiante universitario para dar con los responsables del tráfico de drogas.

Dos de los que se lo deben todo –al margen de por sus méritos interpretativos– a una serie son Will Smith y George Clooney . El primero por su papel en «El Príncipe de Bel-Air» todo un fenómeno televisivo que aún hoy en día sigue en lo más alto en la lista de las series más recordadas de la audiencia en todo el mundo. El otro sin lugar a dudas es George Clooney. El personaje del Doctor Douglas Ross en «Urgencias» le elevó a las alturas televisivas y dio el gran salto al cine, donde desde hace un tiempo además de interpretar se ha ganado un más que merecido puesto como director y productor. Su último proyecto, «Cath 22» .

Denzel Washington, tras una breve aparición en la TV movie «Wilma» allá por 1977, consiguió un papel en «St. Elsewhere», un culebrón hospitalario –aquí en España se emitió por las autonómicas– en el que tenía el papel de un médico afroamericano. Nuestro Javier Bardem , uno de nuestros actores más internacionales, dio sus primeros pasos como actor a los seis años de la mano de Fernando Fernán Gómez en la serie de TVE «Los pícaros».

Jennifer Aniston se dio a conocer gracias a su papel de la intermitente novia de Ross Geller en «Friends» . Sally Field, mucho antes de que en 1979 recibiera un Oscar por su papel en «Norma Rae», debutó como surfista en «Gidget», una comedia de ambiente juvenil. Una especie de «Sensación de vivir» versión 1969.

«Mad Max» encumbró a Mel Gibson ; pero antes de sus carreras apocalípticas fue uno de los protagonistas de «The Sullivans», una serie de gran popularidad en la televisión australiana. Tommy Lee Jones –en 1993 obtuvo un Oscar por su papel en «El fugitivo»– comenzó su carrera en la teleserie «One Live to Live». Quién se podía imaginar que otro de su quinta, Morgan Freeman, había comenzado también en le medio catódico, interpretando varios papeles en «The Electric Company», un programa infantil en la década de los setenta.

Otro que también empezó trabajando para los niños fue Ryan Gosling, el protagonista de «Drive» o «El diario de Noah». Fue la estrella infantil de «Mickey Mouse Club» e intervino en series como «El joven Hércules». Leonardo DiCaprio , antes de ser el niño mimado de Martin Scorsese y hacernos sufrir con su personaje de Jack en «Titanic», apareció durante varias temporadas en «Los problemas crecen». De temática familiar era «Family Ties» («Asuntos de familia»), la serie que descubrió el talento de Michael J. Fox. Por el papel ganó tres Emmy y un Globo de Oro. Tanto Michael Douglas como Bruce Willis también tienen un pasado televisivo . Al hijo de Kirk Douglas la primera llamada de Hollywood para interpretar su primera película le llegó cuando trabajaba junto a Karl Malden en «Las calles de San Francisco». Al héroe de acción, por su parte, cuando tenía más pelo que ahora (eso hay que decirlo) la fama llamó a su puerta tras el gran éxito de «Luz de luna».