Suscríbete
Pásate a Premium

SEVILLA AL DÍA

El juego de la silla

Sanz quiere llegar a un consenso con el lío de la ordenanza de veladores en el que él solito se ha metido, pero sabe que es imposible: los bares quieren más y los vecinos siempre menos

Mario Daza

Mario Daza

Sevilla

Esta funcionalidad es sólo para registrados

EN el libro del estilo del buen sevillano hay tres elementos básicos que son irrenunciables: la calle, el sol y los veladores. El primero continúa siendo gratis y parece complicado que vayamos a renunciar a él. El segundo sabemos que existió, aunque este clima británico ... que se ha instalado en la ciudad nos lo haya arrebatado, esperemos que no para siempre. Y el tercero, el gusto de sentarnos en una terraza de un bar cualquiera a beber una cerveza y tomar una tapa, está en el centro del debate político municipal por ese callejón sin salida en el que se ha metido solito el alcalde cuando decidió reformar la ordenanza de veladores. La intención era buena, pues se trataba de poner orden en una situación que se había vuelto caótica, pero la realidad es que se ha convertido en una batalla de intereses particulares en la que Sanz tiene demasiado que perder y muy poco que ganar.

Artículo solo para suscriptores

Esta funcionalidad es sólo para suscriptores

Suscribete
Comentarios
0
Comparte esta noticia por correo electrónico

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Reporta un error en esta noticia

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Muchas gracias por tu participación