Por qué algunas personas necesitan menos horas de sueño
La psicóloga experta en sueño Nuria Roure explica, entre otras cosas, cómo dormir bien las horas que estás en la cama
Paloma Gual, experta en redes sociales: «¿Tus publicaciones las haces para que te acepten los demás o para ti?»

Dan igual las horas que duerma que siempre me levanto con sueño. Sin embargo, hay quienes aseguran que duermen diariamente unas cinco o seis horas y no necesitan más: que si se acuestan tarde por trabajo, que si se levantan temprano por el mismo motivo o para hacer deporte... En definitiva, parece haber una desigualdad de necesidades en cuanto a sueño se refiere. ¿Es posible que unas personas requieran de menos horas para aguantar todo el día y que otras tengan que cumplir con la media de las 7 u 8 horas diarias ( y si se pudiera más, más) porque si no no pueden con el día? La respuesta es sí.
¿Vives o sobrevives?
La doctora Nuria Roure, psicóloga experta en sueño y autora de 'Por fin duermo', comenta que generalmente el 90% de la población necesitamos dormir entre 7 y 8 horas, pero hay un 5% de la población, a los que se conoce como dormidores cortos, que con 5 o 6 horas tienen suficiente.
Al parecer, no son los únicos. Se ha descubierto -en varios estudios llevados a cabo en un laboratorio de la Universidad de California- que por una alteración en un gen, incluso pueden dormir hasta 4 horas únicamente y no tener consecuencias en su sueño. «Se han visto muy poquitas familias con esta mutación. La mayoría de las personas que te dicen 'yo con cinco o seis horas tengo suficiente', lo que hacen es autoengañarse. ¿Por qué? Porque a lo mejor duermen menos horas de las que necesitan, pero después están con consecuencias negativas a nivel de salud», expone.
Pese a que ese 5% de la población lo practique, no parece funcionar del todo. La experta en sueño asegura que si estas personas al día siguiente se sienten con energía y vitalidad es porque han reparado la parte física del cuerpo: «Las últimas horas de la noche son muy importantes para reparar toda la parte cognitiva y emocional. Es decir, por muy activos que se encuentren, les cuesta concentrarse en el trabajo, tienen despistes, pérdidas de memoria, procrastinan, les cuesta tomar decisiones, están un poco más irritables o con cambios de humor y todo esto no lo relacionan con esa falta de sueño».
Si no haces nada, no necesitas dormir ocho horas
Si dormir pocas horas tiene también una parte negativa en estas personas, la regla de dormir entre siete u ocho horas tampoco es aplicable a todo el mundo. Las horas de sueño muchas veces se relacionan con la edad. Por ejemplo, a medida que nos hacemos mayores tenemos menos necesidad de sueño cuando lo cierto es que las horas de sueño se relacionan con las conductas que tenemos durante el día.
«Una persona sedentaria que no se mueve, que no hace ejercicio, no está generando adenosina, la hormona que nos va a hacer llegar a las fases más profundas de sueño. Entonces una persona sedentaria no va a dormir tan profundamente como una persona que hace ejercicio y se mueve durante el día», aclara Nuria Roure.
¿Qué ocurre? Que vemos personas de 40 años muy sedentarias y vemos personas con 65 o 70 años muy activas. Pero no solo es lo físico... La psicóloga cuenta que si una persona tiene un trabajo muy rutinario o muy manipulativo y no trabaja su mente, no lee, no se informa, no estudia... a nivel cognitivo no tendrá tampoco tanta necesidad como a lo mejor una persona con 65 años que se jubila pero se ha apuntado a la universidad para mayores. Esta persona tiene hábitos de persona joven y va a tener más necesidad de dormir porque está más activo y su mente está trabajando mucho más.
«Es la edad pero también tienen que ver esos hábitos y conductas que hacemos durante el día. Sobre todo el ejercicio es lo que ayuda a dormir más profundamente», insta la autora de 'Por fin duermo'.
Por qué no me duermo
Hay días que arrastro el sueño hasta la noche y, sin embargo, no pego ojo. Entro en la cama con cansancio pero no me duermo, y para esto la doctora Nuria Roure también tiene respuesta: porque necesitamos una desconexión física de nuestro cuerpo y una desconexión mental de nuestra mente.
«Cuando llegamos muy cansados a la cama puede ser que nuestra musculatura esté muy activa, tengamos los músculos muy cargados y necesitemos antes relajarnos, relajar esa musculatura. Y también a nivel cognitivo: si yo voy buscando el sueño, cuantas más ganas tenga de dormir menos voy a dormir. Hacer actividades relajantes, como una ducha calentita nos ayudará», recomienda Nuria Roure.
Además, el pensamiento de 'no me duermo, no puedo dormir...' genera mucha ansiedad y esa ansiedad precisamente es lo que te mantiene despierto. Coger el móvil estimula un montón. Todo el rato haciendo 'scroll' activa mucho la mente y sobre todo la luz que emite el dispositivo hace que tampoco después podamos agregar esa melatonina porque la melatonina necesita oscuridad.
Suplementación para dormir mejor
Y quienes no pueden dormir tienen un pensamiento relacionado con la suplementación que podría ayudarles a dormir plácidamente cada noche. Pero lo cierto es que a día de hoy hay tantas formas y marcas que los expertos quieren poner freno: «Es muy importante siempre buscar la causa de ese mal dormir».
Habría que preguntarse: ¿Por qué estoy durmiendo mal?, ¿por qué tengo un sueño poco profundo? La experta indica que a veces tomar el suplemento lo que hace es una función de parche, es decir, no lo estás tratando y hay una causa detrás. «Si eres una persona sedentaria y no llegas a sueño profundo, tomarte un suplemento no te va a ayudar tanto como si te empiezas a mover durante el día».
Lo cierto es que la mayoría de la sociedad toma suplementos porque se lo ha dicho una compañera, una amiga pero en ningún caso se comparte el mismo motivo. «Hay gente que me dice: 'Nuri, a mí no me hace nada la melatonina'. Y yo les digo: 'claro, porque a lo mejor tú tienes un problema de ansiedad y la melatonina no relaja la ansiedad; la melatonina lo único que hace es regular el ritmo circadiano. Si tú no tienes un problema de regulación del ritmo, no te va a ayudar».
En este sentido sale a relucir el magnesio. Está empezando a hacerse famoso como suplemento que ayuda a relajar la mente, pero la psicóloga advierte nuevamente de lo mismo: «Si tú tienes problemas de sueño a lo mejor es porque estás con el móvil hasta última hora y no has generado tu suficiente melatonina, así que por mucho que tomes magnesio no te va a ayudar». No obstante, reconoce, «sí que podemos ayudarnos de ello un tiempo concreto, como una muleta: «Cuando tú te rompes una pierna, la muleta te ayuda durante el tiempo en el que estás en rehabilitación, pero nadie espera estar siempre con la muleta. El suplemento o el fármaco tendría que ser igual».
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete