Nueve de los diez institutos de Sevilla que más inflaron la nota el curso pasado son públicos

La afirmación era para insinuar que esa «inflación» de notas sólo se produce en los centros privados. Es un discurso que mantiene parte de la progresía que atribuye ese inflado de notas a los colegios concertados y privados para aupar a sus alumnos en Selectividad ya que las calificaciones del Bachillerato suponen el 60 por ciento de la nota final en la prueba de acceso a las universidades. Es decir, estos centros colocarían a sus alumnos en mejor posición de cara a alcanzar las elevadas notas de corte que hacen cada vez más difícil el acceso a determinadas carreras y, además, porque a los centros les sirve para adquirir mejor reputación.

Sin embargo, esa afirmación del rector de la Hispalense no se corresponde con los datos reales, porque si se observa la diferencia entre las notas medias de Bachillerato y la media de la fase obligatoria de la Selectividad del pasado curso 2022/2023, todos los estudiantes sacan mejores notas en el boletín que se llevan a casa tras acabar el curso que las que luego sacan en las pruebas de Selectividad. O lo que es lo mismo, lo que se dice inflar, inflan todos: institutos, colegios privados y centros concertados. Sólo que algunos lo hacen más que otros.

Los datos a los que ha tenido acceso ABC son una respuesta de la Dirección General de Coordinación Universitaria de la Consejería de Universidades de la Junta de Andalucía a un director de un centro de la capital y demuestran las diferencias que existen entre la nota media de Bachillerato (la que ponen los colegios) y las que sacaron en la fase general de Selectividad antes de hacer la media con el expediente.

Pues bien, si se ordenan esos datos de mayor a menor se da la circunstancia de que nueve de los diez centros que más diferencias hay entre esas notas son públicos. El décimo es un centro privado de Utrera.

Esos mismos datos reflejan diferencias muy destacables entre la media del Bachillerato y la que los alumnos sacan en Selectividad. Así, es reseñable que los institutos en los que existe mayor inflación se ubican en zonas de transformación social.

Encabeza este ranking, con una diferencia de hasta 4,5 puntos entre Bachillerato y Selectividad, el instituto Antonio Domínguez Ortiz (en Las Letanías); seguido del Salvador Távora, con 3,1 puntos de diferencia, en Parque Amate; y el Centro de Convenio Hispalis, con 2,8 puntos de diferencia. En esa 'top ten' el número 9 es para el centro privado Nuestra Señora del Carmen de Utrera.

Los datos de la Junta de Andalucía muestra otros centros privados con diferencias de dos puntos entre las notas medias de Bachillerato y las de Selectividad. En esas posiciones se encuentra ADA Instituto Tecnológico Superior, con 2,3 puntos de diferencia; seguido de Altair, con una diferencia de 2,2 puntos; y el centro privado Montaigne (2,08). Esto supone que entre los veinte centros educativos que más inflan las notas, sólo hay cuatro privados.

En el grupo de los centros privados que mantienen esas diferencias están, además de los anteriormente citados, la Academia Preuniversitaria (1,8 puntos de diferencia); el colegio Marcelo Spínola de Umbrete (1,7); el Calasancio Hispalense, el Virgen Milagrosa y el colegio La Loma-Maestro Cristóbal Chanfreut de Dos Hermanas (1,5); o el colegio Sagrado Corazón (Las Esclavas) con 1,5 puntos también.

Por contra, si se miran los datos de la tabla elaborada con los datos de la Administración autonómica, en la lista de los que menos inflan las notas están Albaydar (0,03 puntos), el IES Palomares (O, 03) y los institutos Hermanos Machado de Dos Hermanas (0,01) o el IES Gerena.

En centros muy demandados como el Fernando de Herrera de la capital la diferencia es de 0,3, prácticamente la misma que en el Claret, en el Highlands (0,8), en el San Fernando (Maristas) también es de 0,8, casi igual que en los Salesianos de la Santísima Trinidad o el instituto San Isidoro.

En el St Mary's School, que el año pasado sacó la nota media más alta de Bachillerato, la diferencia es de 0,9; en el instituto Murillo de un punto, prácticamente igual que en Sagrados Corazones (Padres Blancos).

Otros ejemplos son el Yago School, que tiene 1,08 puntos de diferencia; el Altasierra, 1,06; el Buen Pastor, 1,1; y el Centro Docente María, 0,7. Los datos ponen de manifiesto que esa inflación de notas de los alumnos al acabar Bachillerato es una práctica extendida, tanto en la pública como en la privada, pese a que el foco habitualmente se pone en esta última.