la ventana indiscreta
Linchar a Pablo Motos
Cancelar al presentador de 'El Hormiguero' es deporte nacional, da igual que Sofía Vergara salga a defenderlo
Sofía Vergara habla por primera vez sobre la polémica entrevista en el 'El Hormiguero' con Pablo Motos

A Pucho le tangaron cuando era Antón y no C. Tangana en un episodio tan cañí que podría haber sido 'Pesadilla en la cocina' aunque fuera más digno de 'El jefe infiltrado'. Le contó el cantante a Jordi Évole que tuvo una jefa que le ... recortaba las horas extra cuando trabajaba en Pans&Company sin saber que, ya sin grasa ni olor a tostado, aquel chaval al que explotaba le iba a sacar las vergüenzas delante de toda España. La venganza Pucho se la cobró en 'prime time', y a la compañía de bocadillos todavía tienen que escocerle las harinas porque el zasca del 'madrileño' se escuchó hasta en EE.UU., donde se motivan haciendo spinning escuchando el himno que compuso para el centenario del Celta.
La vida es así de imprevisible, un día la toma con el anónimo y otra con el que es todo lo contrario. Si Pablo Motos no fuera conocido pasaría por el típico amigo cuñado, pero es el responsable del programa de más éxito de la televisión patria. Se le mira con lupa hasta el alma, y no porque sea bajito sino porque todo lo que dice resuena muy alto, gracias a esa capacidad sobrehumana que le hace acaparar titulares aunque haya estrellas internacionales entre sus invitados. La fórmula infalible siempre lleva, junto a Motos, la palabra machista al lado, por preguntar a Elsa Pataki por su ropa interior o porque se le ocurra, uy, arrimarse demasiado a Trancas y a Barrancas.
El otro día lo crucificaron por entrevistar en 'El Hormiguero' a Sofía Vergara, por meterse con su acento y hablar de su físico. Hubo tensión en su visita, hubo vacile y bromas varias, pero resulta que son amigos, se quieren mucho y todo formaba parte de un guión desacertado. Tuvo que salir la actriz a defender a Pablo Motos porque nadie creyó al presentador cuando se justificó tras la polémica. Lo mucho que nos cuesta a veces ver la otra cara del relato.
A Pablo Motos se le ve mucho pero se le odia más. Se olvida que 'El Hormiguero' es un programa de entretenimiento blanco. Los famosos hacen lo que siempre quiso y no pudo Umbral con Mercedes Milá, hablar de su libro, y el precio es reír o no con algún chiste malo. A Sofía Vergara no le importó, ni tampoco a Chris Hemsworth, el marido de Pataki. Lo increíble es que nos importe tanto al resto como para saltar rápido y linchar. La piel es del grosor de una hormiga y el humor... escaso.
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete