Odisea para cargar el coche

Estas estaciones de carga te reservan un par de aparcamientos convenientemente señalizados para que solo puedan estar ahí los coches que estén recibiendo un chute de electricidad. El tiempo medio de carga puede ser de cuarenta minutos a varias horas según sea el coche. Los fondos europeos son los que subvencionan a las empresas que han decidido pedir ese espacio para colocar un servicio que la verdad es un signo de los nuevos tiempos que vienen y de cierta modernidad. Pues a veces no hay manera de cargar porque el personal no se ha enterado todavía para lo que sirven esos aparcamientos reservados. Da el mismo coraje encontrarte el coche aparcado sin que esté recibiendo la carga como el que exhiben los transportistas cuando ven coches aparcados en las zonas de carga y descarga. Y lo peor es que cuando pitas, si te sale el conductor infractor te arriesgas a una bronca o a una pelea para la que no te habías levantado preparado.

Hace falta hacer un poco de pedagogía. O yo propongo algo que pueda funcionar mejor. Colocar cámaras en este tipo de vados al menos para que el que pretenda aparcar se lo piense dos veces porque si le graban la matrícula probablemente en breve le llegue un regalo de la agencia tributaria municipal. Fin de la carga.