Violentos enfrentamientos en El Alto, Bolivia, en la marcha liderada por Evo Morales contra el Gobierno de Luis Arce

Evo Morales y sus seguidores iniciaron una marcha el pasado martes desde Caracollo en Oruro y pretenden llegar a la ciudad de La Paz, sede de gobierno, este lunes 23 de septiembre. El expresidente boliviano asegura que está movilizado por la crisis que atraviesa Bolivia, la falta de combustible, dólares y el alza de precios, sin embargo, es acusado de buscar una nueva reelección pese a que las leyes lo prohíben.

Los simpatizantes de Morales no han dudado en expresar que para salir de la crisis se necesita a «Evo presidente». Por esas declaraciones, el gobierno del presidente Luis Arce lo acusa de buscar acortar su mandato a través de la movilización, un «intento de golpe de Estado».

Luis Arce y Evo Morales pertenecen al mismo partido político, el Movimiento al Socialismo (MAS), no obstante, están enfrentados desde el 2021. Mientras que el actual presidente busca una reelección, Evo quiere ser habilitado, contra las leyes bolivianas, como candidato para las próximas elecciones el 17 de agosto del 2025, dice que es su «derecho humano».

En ese contexto, algunas organizaciones afines al gobierno boliviano se concentraron este domingo, muy temprano, en la zona de Ventilla de la ciudad de El Alto, para evitar que Evo Morales y su marcha ingresen a esa urbe. Aproximadamente a las 15 horas los primeros marchistas llegaron al sector y comenzaron los enfrentamientos.

La Policía tuvo que usar gases lacrimógenos para dispersar a los grupos enfrentados y aunque lograron detener las agresiones por unos minutos, las vigilias permanecían. Los miembros del orden todavía están en resguardo del lugar.

La Asamblea de la Alteñidad, que agrupa a sectores sociales importantes de El Alto emitieron un pronunciamiento. Se declaran en estado de emergencia contra la «marcha de la muerte», piden disolver la movilización y la «detención inmediata» de Evo Morales, por el delito de sedición.

Por su parte, el presidente Luis Arce envió una carta de convocatoria al diálogo para Evo Morales, sin embargo, el responsable de entregar la invitación fue golpeado y echado de la marcha. Luego el expresidente exigió que para instalar el diálogo el presidente y vicepresidente de Bolivia deben acudir a la marcha. El ministro de Gobierno Eduardo del Castillo descartó esa posibilidad porquer se pondría en riesgo la vida de las primeras autoridades.

Es que durante la marcha decenas de personas fueron agredidas y heridas. Entre ellas, más de diez periodistas, a quienes les robaron sus equipos de cámara y celular, otros fueron obligados a borrar imágenes donde se registraron las agresiones.

La Iglesia Católica se ha sumado a las instituciones que piden que se instale el diálogo entre los dos sectores enfrentados, para evitar que la violencia siga escalando en ese país. En la misma línea la Defensoría del Pueblo y Derechos Humanos han emitido comunicados.

Evo Morales aún no llegó a la zona de conflicto y detuvo su recorrido en una zona cercana, Achica Arriba, pretende ingresar a la ciudad de El Alto este lunes y luego descender a la ciudad de La Paz.

«El señor Evo Morales y sus fanáticos atacaron un cabildo que se desarrollaba en Ventilla», publicó el ministro de Gobierno boliviano, la autoridad asegura que hay al menos tres personas heridas, aunque los enfrentamientos continuaban.

La mañana de este domingo la policía comenzó a cercar el ingreso peatonal y vehicular de la Plaza Murillo, donde se encuentran las oficinas gubernamentales. Mientras que desde la cancillería informaron que se envió una carta a la Organización de Naciones Unidas y la Corte Interamericana de Derechos Humanos denunciando actos de desestabilización con la marcha, que buscan acortar el mandato del presidente Luis Arce y vicepresidente David Choquehuanca.

Los enfrentamientos y el uso de gases lacrimógenos por parte de la policía continuaban pasadas las cuatro de la tarde, hora boliviana.