Pocas novedades y muchas críticas en la primera fase de las revelaciones de los 'papeles de Epstein' por parte de la Administración Trump

«La primera fase de la divulgación de estos archivos saca a la luz la amplia red de Epstein y empieza una rendición de cuentas con los ciudadanos que se ha hecho esperar», defendió Bondi en el comunicado del Departamento de Justicia en el que presentaron los documentos.

La realidad es que no había nada nuevo. El volcado de documentos incluía los registros de vuelo del llamado 'Lolita Express', el avión privado de Epstein, que ya se conocía y en el que aparecen figuras de todo tipo, desde Bill Clinton al actual presidente de EE.UU., Donald Trump. El 'Lolita Express' fue uno de los símbolos de los abusos de Epstein: con él volaba junto a sus invitados a su isla privada en el Caribe, donde se cometieron muchas de esas actividades presuntamente delictivas (pero no todos los que iban en el avión iban a la isla ni participaban de esas actividades). También se conocía la amplia lista de contactos de Epstein, que fue durante años uno de los fijos de la vida social de las elites de EE.UU. y que aparece en el volcado. Los papeles incluyen un listado de las 254 personas que fueron contratadas por Epstein para dar masajes -ese era el primer paso antes de ser prostituidas-, pero todos sus nombres aparecen tachados.

Epstein fue detenido en el verano de 2019, pero murió en una celda de Nueva York antes de que fuera a juicio. Las autoridades determinaron que la causa del fallecimiento fue suicidio, aunque muchos en EE.UU, han dudado de ello y consideran que forma parte de una conspiración para ocultar la identidad de quienes participaron de las correrías de Epstein.

Durante la campaña electoral, Trump alimentó esas versiones y prometió que, con él en el Gobierno, se divulgaría todo lo que ha estado oculto sobre Epstein. Eso dijo también Bondi, que además trató de hacer un guiño a los votantes de Trump con una forma particular de comunicación política: horas antes de que se volcaran los documentos de forma oficial, fueron entregados a un puñado de 'influencers' conservadores. Entre otros, Chaya Rachik, DC Draino o Mike Cernovic. Se hicieron fotos con carpetas blancas con el título: 'Los papeles de Epstein, Fase I'.

Pero la ausencia de información irritó a muchos 'trumpistas', que esperaban mucho más. Por ejemplo a la diputada Anna Paulina Luna, que lidera un grupo de trabajo en la Cámara de Representantes sobre transparencia gubernamental.

«Ni a mí ni al grupo de trabajo nos han facilitado los documentos de Epstein revelados hoy», dijo Luna en la red social X. «Esto no es lo que esperaba el pueblo de EE.UU. y es una decepción completa».

También condenó la operación el comentarista conservador Glenn Beck: «Los 'papeles de Epstein' son una broma», escribió en la misma red social. «¿Quién está yendo contra el presidente de EE.UU.?»

La falta de revelaciones también provocó turbulencias dentro del Departamento de Justicia. En su comunicado, se reconocía que la «mayoría» de los documentos revelados ahora ya habían sido filtrados con anterioridad, aunque no hubieran sido divulgados de forma oficial por el Gobierno. El Departamento de Justicia aseguró al mismo tiempo que Bondi fue informada de que hay «miles de páginas de documentos relativos a la investigación y la imputación de Epstein que no han sido revelados anteriormente». Al parecer, miembros del FBI no los habían compartido. Ahora, Bondi ha exigido que sean transferidos en su totalidad antes de las ocho de la mañana del viernes (dos de la tarde en España) y que ha pedido al nuevo director del FBI, el polémico Kash Patel, que investigue «por qué no se cumplió con la petición de entregar todos los documentos».

Ahora habrá que ver si las próximas fases de volcado de documentos relativos a Epstein ofrecen más revelaciones que las proporcionadas hasta ahora por la Administración Trump.