Berlusconi, un seductor en un país que ama el populismo
Los italianos necesitan un jefe capaz y determinado a conseguir el poder; 'Il Cavaliere' representa el 'architaliano'
Las notas de Berlusconi sobre Meloni: « Sabionda, prepotente, arrogante, ofensiva y ridícula»
Berlusconi anuncia que ha retomado su relación con Putin: «Me ha regalado veinte botellas de vodka»

Dicen que Silvio Berlusconi parecía Nerón en días pasados, observando cómo ardía el centro derecha que él fundó. Mientras se negociaba la formación del nuevo Gobierno, 'Il Cavaliere' sopló el fuego, al defender a su amigo Vladímir Putin, como no ha hecho ningún ... otro líder europeo, justificando la invasión de Ucrania y atacando al presidente Zelenski, al que considera responsable de la guerra. Al final, 'Il Cavaliere' ha perdido el pulso que echó a Giorgia Meloni.
Ha sido muy duro para quien fue cuatro veces primer ministro y soñó con llegar a ser el presidente de la República, pasar el cetro a una mujer que casi tiene la mitad de sus años. Silvio Berlusconi (86), se ha tenido que rendir ante Giorgia Meloni (45) y ver por televisión el juramento de la nueva primera ministra, lo que certifica un cambio histórico en Italia, con una mujer por primera vez jefa de Gobierno. Se ha cerrado un círculo.
Hace un decenio Meloni abandonó a 'Il Cavaliere' para fundar su propio partido y hoy manda en Italia y en las derechas, y se permite desairarlo. Hasta el último segundo, Berlusconi trató de negociar el Ministerio de Justicia, que consideraba vital para sus intereses. Lo intentó también en las puertas del Quirinal el viernes cuando el presidente de la República recibió a la coalición de la derecha: «Giorgia, Forza Italia debe tener la Justicia o no se forma gobierno». La respuesta de Meloni, según cuentan los medios italianos, fue clara: «O lo tomas, o lo dejas».
Berlusconi ha tenido que confesar: «Ella ha elegido a nuestros ministros». Giorgia Meloni ha impuesto sus reglas en un país machista y en un mundo de hombres como es la política italiana. Hoy todos elogian su determinación, porque logró un gran éxito en un tiempo récord: fundó un partido en el 2012, pasando del 4% en las elecciones de hace 4 años, al 26% del pasado 25 de septiembre. En clave moderna, Meloni ha hecho una especie de 'veni, vidi, vici».
Pero, mientras muchos italianos aplauden a Giorgia Meloni, Italia observa el ocaso de Silvio Berlusconi y se pregunta, al igual que muchos europeos, tras asistir atónitos en estos días al inefable espectáculo político que ha dado, cómo ha sido posible que el magnate de los medios de comunicación haya sido el gran protagonista de la política italiana durante casi tres décadas, votado por millones de italianos.
Muchos se identificaron y admiraron el personaje que encarnaba Berlusconi: un empresario de éxito, hecho a sí mismo
Para entender el 'fenómeno Berlusconi' hay que partir de un hecho: 'Il Cavaliere' ha sido un genial vendedor de sí mismo, proponiéndose como un personaje representativo de la sociedad italiana, con sus virtudes y defectos, es decir, un auténtico 'architaliano'. Muchos se identificaron y admiraron el personaje que encarnaba Berlusconi: un empresario de éxito, hecho a sí mismo, que partiendo casi de la nada ha creado un imperio mediático, con una fortuna de unos 7.000 millones de euros, según 'Forbes'. Berlusconi se movió siempre sin escrúpulos en todos los terrenos, contó con los mejores abogados, y ha dominado la lógica del poder italiano e internacional.
Ambición de poder
Por otro lado, no hay que olvidar, como apuntan algunos historiadores, que Italia tiene un vicio antiguo: el populismo. Casi siempre ha sido dominada o atraída por el populismo: un jefe capaz y determinado a conquistar el poder, reforzarlo y mantenerlo, basándose en sus dotes de seducción. En este terreno, Silvio Berlusconi se ha movido como pez en el agua. Se explica así la fascinación que ha podido causar en buena parte de los italianos. El ex primer ministro ha sido siempre un gran actor, mujeriego, un excelente comunicador, capaz de embaucar a más de diez millones de votantes, utilizando el poder fundamentalmente para sus intereses personales con numerosas leyes 'ad personam', con la ayuda de su imperio mediático, en particular sus tres canales de televisión.
«Berlusconi no sabe envejecer, todavía se siente el capo. Y le hará la vida difícil a Giorgia Meloni»
Giuliano Urbani
Exministro de Bienes Culturales
Es verdad que el ex primer ministro ha perdido mucho apoyo, desde que en 2001 lo votaron casi once millones de personas. En los últimos comicios, Forza Italia logró el peor resultado: 2.279.130 (8,11%), frente a 4.596.956 (14%), hace 4 años. «Berlusconi no sabe envejecer, todavía se siente el capo. Y le hará la vida difícil a Giorgia Meloni». Este es el diagnóstico que hace el exministro de Bienes Culturales, Giuliano Urbani, profesor universitario y amigo histórico de 'Il Cavaliere', uno de los fundadores de Forza Italia, en 1994. «Berlusconi ve a Meloni como una usurpadora. Él se considera el centro del mundo. Es su principal debilidad. Pero así no hace otra cosa que coleccionar autogoles, como el referido a Putin, que me parece increíble».
Quienes lo votaron en las últimas elecciones lo hicieron porque creyeron que Forza Italia era el partido más europeísta y moderado de las derechas. Pero hoy Silvio Berlusconi es una caricatura de sí mismo, incompatible con la nueva derecha liderada por Giorgia Meloni, que se ha revelado como un animal político, según afirma el reconocido politólogo Roberto D'Alimonte: «Giorgia Meloni es un verdadero animal político, y en un mundo machista como el de Italia, está demostrando firmeza».
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete