Acusados de extremismo: el Kremlin arresta a periodistas rusos que trabajaban para el canal de Youtube de Navalni

Al Kremlin no le bastó la muerte de Alexéi Navalni y continúa la persecución. Este sábado, la justicia de Moscú anunció la detención de Konstantin Gabov, un periodista ruso que colaboraba con varios medios, y quien está acusado de «extremismo» por participar en la creación de vídeos para el canal de Youtube de Navalni.

Gabov permanecerá al menos dos meses detenido hasta que se inicie el juicio, según informó el servicio de prensa de los tribunales en Telegram. El periodista colaboró con varios medios de prensa, entre ellos las cadenas de televisión rusas Moskva 24 y MIR y la agencia bielorrusa Belsat, según medios de comunicación rusos. Asimismo, la agencia de noticia rusa TASS lo identifica como productor de Reuters.

La justicia rusa le reprocha haber «participado en la preparación de fotos y vídeos destinados a ser publicados en el canal YouTube NavalnyLIVE, indicaron los tribunales, en referencia a una de las plataformas utilizadas por el equipo de Navalni.

Por los mismos señalamientos fue arrestado el periodista Sergey Karelin, según informa 'The Guardian'. Karelin también ha colaborado con varios medios, incluyendo a AP y trabajó como camarógrafo para la alemana Deutsche Welle hasta que en febrero de 2022 el Kremlin prohibió al medio operar en Rusia.

Ambos periodistas enfrentan un mínimo de dos años de prisión y un máximo de seis por su participación en «una organización extremista», que es como fue clasificada la Fundación para la lucha contra la corrupción del fallecido líder opositor Navalni.

A finales de marzo, Antonina Kravtsova, fotoperiodista que trabajaba bajo el nombre de Antonina Favorskaia, también fue detenida por cargos de «extremismo». Otros periodistas se encuentran detenidos en Rusia, entre ellos el estadounidense Evan Gershkovich, acusado de «espionaje».

Una periodista ruso-estadounidense, Alsu Kurmasheva, que trabaja para Radio Free Europe/Radio Liberty (RFE/RL), también está detenida desde octubre de 2023 por no haberse registrado como «agente extranjero» como exigen las autoridades.