Kim Kardashian declarará por el robo de sus joyas en París en 2016

Daniella Bejarano

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27/03/2025
Actualizado a las 13:22h.

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Fue una en octubre en 2016 cuando Kim Kardashian vivió uno de los momentos más duros de su vida. Durante su estancia en París con motivo de la Semana de la Moda, la socialité sufrió un asalto a mano armada en el lujoso apartamento donde se alojaba con algunos familiares y amigos, en el que los atracadores se llevaron sus joyas, valoradas en al menos 10 millones de dólares. Aunque parecía que el caso estaba cerrado tras cinco años de investigación en los que incluso la modelo llegó a testificar, 'TMZ' ha dado a conocer que Kim declarará ante los juzgados en mayo.

Si bien en un principio 'AFP' adelantó que el juicio se llevaría a cabo entre el 28 de abril y el 23 de mayo, el citado medio estadounidense aseguró que la empresaria acudirá a los juzgados en mayo, ante un jurado conformado por 12 personas.

Los hechos ocurrieron el 3 de octubre de 2016, en el apartamento que las Kardashian-Jenner alquilaban en el lujoso Hotel de Pourtales. Esa noche, varios individuos irrumpieron en el piso buscando dinero en efectivo y pertenencias de valor, llevándose el anillo de compromiso que Kanye West le regaló a Kim Kardashian.

Según el relato de la socialité, al principio pensó que los ruidos provenían de su hermana Kourtney y una amiga, que habían salido de fiesta. No obstante, instantes más tarde se dio cuenta de lo que realmente ocurría. «Automáticamente, mi estómago se me hizo un nudo. Es una sensación que no puedo explicar. Recé y pensé: 'Sé que iré al cielo. Espero que mis hijos y mi esposo estén bien», comentó en el programa de Ellen DeGeneres.

Durante su conversación con la famosa presentadora de televisión, Kardashian aseguró que llegó a pensar que los atracadores abusarían de ella: «Me tiró hacia él frente a la cama y pensé: 'Vale, este es el momento en que me violarán. Me preparé por completo mentalmente, pero no lo hicieron. Todo sucedió 'muy rápido'», explicó. «Cuando lo recuerdo me pongo a pensar que pudo haber sido mucho peor, así que no quiero sonar como si no estuviera agradecida. Salí, estoy en casa, estoy segura, soy una persona mejor, todo está mejor», concluyó.

El caso fue tan mediático que incluso Francois Hollande, entonces presidente de Francia, se involucró. Según revelaron fuentes cercanas a la modelo, el exmandatario «se había comprometido a proporcionar seguridad adicional la próxima vez que Kardashian viajara a Francia». En tanto, Kim no fue la única que estuvo presente durante el robo. Su amiga, Simone Harouche, se escondió en una habitación sin que los ladrones que dieran cuenta, y logró alertar a la familia de la empresaria sobre lo que estaba pasando.