Sánchez asegura que trabajan para sacar los Presupuestos este año o «el que viene»
Feijóo arrincona al presidente con su propia hemeroteca por no presentar la cuentas públicas e insiste en que convoque elecciones
Acotaciones de un oyente | Vuelve el peor Sánchez, por José F. Peláez
Sánchez intenta convencer al Congreso de que se puede aumentar el gasto en defensa sin sacrificios ni contrapartidas
La estrategia del Gobierno para normalizar la prórroga indefinida de los Presupuestos de 2023 continúa viento en popa. Después de un acalorado debate monográfico en el Congreso de los Diputados en el que el presidente del Ejecutivo, Pedro Sánchez, ha tratado de convencer a los ... grupos parlamentarios del aumento del gasto en defensa, las formaciones han insistido en la necesidad, y la obligación, del Ejecutivo de presentar unas nuevas cuentas públicas.
Después de que la ministra portavoz, Pilar Alegría, afirmara este martes en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros que el Ejecutivo no va a presentar los Presupuestos sin tener atados los apoyos porque esto supondría «una pérdida de tiempo para la ciudadanía», el Partido Popular ha arrinconado al Gobierno durante la sesión de control tras la comparecencia de Sánchez para recordarle sus propios principios. Proclamas como «un Gobierno sin presupuestos es como un coche sin gasolina» o «entre seguir sin Presupuestos y convocar elecciones me quedo con la segunda», ambas frases sacadas de la hemeroteca del presidente, se han escuchado más de una vez en el hemiciclo a modo de protesta.
Pese a los reproches, Sánchez a insistido en que el Ejecutivo no renuncia y trabaja para sacar las cuentas públicas, «y si no puede ser este año, será el que viene». Esta última coletilla ha provocado la indignación en la bancada del PP a la que la presidencia de la Cámara Baja ha tenido que llamar al orden en varias ocasiones.
«Yo prefiero unos Presupuestos prorrogados que tutelados por la ultraderecha», afirmaba Sánchez dando carta de naturaleza a la prórroga. Un argumento que ha replicado más tarde el ministro de Justicia, Presidencia y Relaciones con las Cortes, Félix Bolaños, que ha pedido desde la bancada azul a los barones populares que dilaten las cuentas antes que cerrarlas con Vox y reeditar el recién bautizado «pacto del Ventorro», por el que el presidente de la Generalitat Valenciana, Carlos Mazón, ha sellado un principio de acuerdo con los de Santiago Abascal para presentar unos Presupuestos autonómicos.
No ha tardado Sánchez en poner la pelota en el tejado de las comunidades autónomas, llegando a apelar a Feijóo para que sea «igual de duro» con sus barones que con el Gobierno central. «Se habrá olvidado del presidente de Castilla y León, que lleva cinco años prorrogando los presupuestos». A esta alusión respondió la diputada popular castellanoleonesa Esther Muñoz, esta vez a la ministra de Hacienda, María Jesús Montero. «La Constitución apela a los presupuestos del Estado, no de las comunidades y todas las gobernadas por el PP los tienen», aseveró Muñoz.
Lo cierto es que si la mañana en el Congreso ha sido una comparecencia monográfica, sobre defensa, la actividad parlamentaria de la tarde también lo ha sido, sobre Presupuestos. Cualquier otra pregunta quedaba opacada rápidamente por las cuentas públicas. Problema de la vivienda, Presupuestos, 'Operación Cataluña', Presupuestos, maniobra del Ejecutivo para crear un canal de televisión a través de Telefónica, Presupuestos.
Junts y Bildu sí han cambiado el tercio en preguntas dirigidas a Sánchez, sobre la situación de Rodalíes y el fondo para víctimas del amianto, respectivamente. La portavoz de Junts en el Congreso, Miriam Nogueras, ha vuelto a insistir en la «situación de caos» de la marca comercial de trenes creada por la Generalitat en 2010 que opera Renfe. La portavoz de Bildu en la Cámara Baja, Mertxe Aizpurua, ha instado a Sánchez a «cumplir con la palabra dada» respecto a la ayuda económica y las reparaciones para las víctimas del amianto. El presidente ha respondido «cumpliremos con nuestros compromisos». Y así ha dado por finalizadas casi seis horas de control parlamentario.
Pero la ofensiva de los populares no ha terminado con la salida del presidente del hemiciclo. Montero se ha enzarzado en una guerra de acusaciones cruzadas con Cuca Gamarra, Miguel Tellado, Juan Bravo y Esther Muñoz. Entre reproches por la falta de Presupuestos, lo que supone incumplir el artículo 134 de la Constitución, los escándalos de corrupción que cercan al entorno de Sánchez y las maniobras para influir en el grupo Prisa, la ministra Montero ha salido del paso echando mano del refranero español, «cree el ladrón que todos son de su condición», ha resumido Montero antes de abandonar el hemiciclo.
Zanjado el tema de los Presupuestos, el resto de la sesión de control ha discurrido con la aparente normalidad de todos los miércoles, con la excepción que ha supuesto para los populares que la presidencia de la Cámara Baja, en ese momento Alfonso Rodríguez Gómez de Celis en lugar de Francina Armengol, les haya llamado al orden en repetidas ocasiones aludiendo al reglamento de la Cámara. «Espero que se acoja al reglamento con la misma contundencia para pedir al ministro que responda a mi pregunta», ha denunciado Cayetana Álvarez de Toledo.
La pregunta iba dirigida a Bolaños, «¿Por qué la amnistía era inconstitucional antes de las elecciones y normal después?». A lo que el ministro de Justicia ha respondido remarcando «la valentía y el talento del Gobierno» por «normalizar» la situación en Cataluña.
Las alusiones al reglamento de la Cámara no han acabado ahí. Álvarez de Toledo ha recordado también la anomalía vivida la semana pasada en el Congreso cuando Gómez de Celis impidió que el Congreso votase un cambio en el orden del día y permitió «mutilar» enmiendas del Senado en una norma. «Cumpla la Constitución», ha zanjado la diputada.
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete