Entrevista con Iago Jóver, responsable del área de Innovación
Vientos de cambio en Roberto Verino: «No buscamos vestirte el cuerpo, sino el alma»
El nieto del diseñador llega a la compañía con ilusión y ganas de cambio, con el legado familiar presente
Penn y Knight: fotografía más allá de la moda

Todo comienza con una llamada telefónica en las Navidades de 2023. Una conversación entre Iago Jóver y su abuelo, Roberto Verino, que marca un antes y un después en la carrera profesional del joven, actual responsable de Innovación en la firma y heredero de ... un legado que revolucionó la moda gallega y española entre los años 80 y 90. «Es uno de esos momentos Steve Jobs, de cuando juntas los puntos hacia delante y nada tiene sentido, pero ahora, mirando hacia atrás, parece que todo cuadraba», indica el nieto del emblemático diseñador.
Las aspiraciones de su niñez, cuando Jóver tenía claro que lo suyo era ser astronauta, fueron evolucionando con el tiempo, manteniendo un patrón común: «Quiero dejar un impacto positivo en la sociedad en la que estoy». «Siempre me ha apasionado todo lo que es la ciencia, la tecnología», afirma, recordando los maratones frente al televisor, viendo en Discovery Channel programas de aliens, civilizaciones y todo lo relacionado con la investigación.
Pero ese interés por ver materializada su aportación al mundo lo llevó por otros derroteros, dejando a un lado la carrera espacial. «¿Para qué? Para coger un cohete, irme a la Asociación Espacial Internacional, estudiar una proteína, PC-14, que a lo mejor hace un cambio en una bacteria. Me parece interesantísimo, me encanta, pero no sé cuánto impacto tendría en la sociedad. Y entonces, bueno, empecé a meterme en lo que sería diplomacia en Naciones Unidas. Y pensé: 'ahí sí, por ahí, efectivamente, puedo hacer el impacto que yo quería'», subraya. De esta forma, Jóver optó por estudiar Ciencias Políticas, una experiencia que lo conectó con su amor por la docencia, además de aportarle una lección vital: «Lo que aprendí es que la política no es la forma de cambiar el mundo, o no la forma en la que yo quería», reconoce.
Fue entonces cuando entró en contacto con el ecosistema de startups, la biotecnología y el emprendimiento, en paralelo a la docencia, de donde extraería ideas y conceptos que luego trasladaría a Roberto Verino, como la reciente creación de la primera pasarela virtual realizada desde el metaverso. «Somos de paso firme, poco a poco, y construyendo de forma orgánica. Lo que se vio la semana pasada fue un teaser, ¿no? Tanto de Roborto –un avatar a semejanza de su abuelo, basado en Inteligencia Artificial para poder realizarle consultas– como del metaverso. Y de aquí a unos meses vamos a ver otro Roborto, un metaverso más inmersivo todavía, si cabe. Otra plataforma en otros sitios, en otros momentos. Es ir paso a paso, construyendo en firme», asevera.
Cultura empresarial
Una pasarela con el sello innovador que anticipa un cambio de mentalidad, que promete novedades, ya que desde su llegada a la firma, que describe como «un amor a primera vista», parece tener claro que su paso por Roberto Verino no será testimonial, conla vista puesta al futuro y cambios propios de un relevo generacional que parece gestarse.
«Estamos introduciendo nuevas culturas de empresa, nuevas metodologías de trabajo, un poco al estilo de las startups», menciona Jóver, que destaca la necesidad de implementar esa energía propia de las empresas emergentes y de menor tamaño, recuperando la esencia de cuando Roberto Verino no era más que una pequeña empresa familiar en el municipio orensano de Verín, con todo el futuro por escribir.
«Me enorgullece mucho que con esta energía de startup, de empresa pequeña, de que las cosas se pueden cambiar, de que, ¡venga!, podemos tener un impacto, lo pueda aportar realmente. Me hace mucha ilusión. Y lo ves realmente en la gente, el hecho de que no estás poniendo pegatinas en un informe y haciendo checks en un Excel, no. Realmente estás haciendo un impacto positivo en muchísima gente. Y eso es muy importante, ¿no? Definitivamente. Creo que es algo que estoy pudiendo aportar», afirma el responsable de Innovación.
Una ambición que manifiesta en su tono, en la ilusión y emoción con la que habla de una compañía y un legado del que no reniega, a pesar de los cambios mencionados, que no entiende de cortoplacismo, con el fin de comunicar una visión «de aquí a cinco, diez, quince, veinte, a cuarenta años».
Pasado, presente y futuro
Señala, al ser preguntado por las décadas de legado de la marca de moda, que «en el ADN de Roberto Verino ya está la innovación y la historia vanguardista de serie», un aspecto que, reconocen, no defienden lo suficiente, y que pone en valor: «Desde la década de los 90 estamos siendo punteros en el desarrollo del producto, de tecnologías. Y entonces es fácil, en ese caso, empezar a lanzar ideas».
«Nuestra defensa de la moda lleva siendo la misma desde hace 40 años. Este es uno de nuestros ejemplos de cómo de importante entender nuestro legado, nuestra historia» señala Jóver, que defiende la tradicional apuesta de Roberto Verino por la 'slow fashion', frente al auge de la moda rápida que ha supuesto el desembarco de empresas como Shein o Primark. «Nosotros, cuando creamos, no buscamos vestirte el cuerpo, sino vestirte el alma. Esto lo que significa es que nosotros no queremos que te compres una prenda para la semana que viene y la tires porque tienes que parecerte a esta persona o a esta otra. No, no, no. Lo importante es que te sientas tú mismo y lo que buscamos es acompañarte en todos los aspectos del día a día en la ropa, en el perfume, en el vino, en todo lo que podamos y que te sientas tú mismo. Porque cuando te sientes tú mismo, entonces eres libre y por lo tanto feliz, ¿no? Y eso es lo que buscamos. No buscamos poner estos estándares ni estas etiquetas ni todo lo contrario», explica el responsable de Innovación de Roberto Verino.
MÁS INFORMACIÓN
Pero la apuesta no está exenta de retos en un mercado tan polarizado y competitivo como el de la moda, ante los que Jóver no se amilana, reconociendo que «siempre se puede mejorar y siempre hay camino». «Tanto Roberto como yo tuvimos que irnos al extranjero para poder trabajar, para poder crecer y darnos cuenta de que, oye, podemos hacerlo en casa y lo podemos hacer igual de bien que fuera. Y si no, mejor. Definitivamente hay todavía recorrido y vamos a seguir caminando y creando, que es lo importante, muy motivados», concluye.
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete