Quiroga, elegida por unanimidad, promete dar «continuidad» al legado de Basagoiti en el PP vasco

Arantza Quiroga (Irún, 1973) ha recogido este martes el testigo de Antonio Basagoiti como la quinta presidenta regional en la historia del PP vasco con un compromiso nítido: procurar «continuidad» al «legado» dejado por su antecesor, del que se siente «partícipe».

En su primera intervención pública en Bilbao tras ser elegida por unanimidad por la junta directiva regional, Quiroga ha adelantado que seguirá la línea emprendida por la dirección de Basagoiti con un PP «abierto», que sea «garante de las libertades» y de la «pluralidad» ocupando el centro de la política vasca. Contará para ello con Iñaki Oyarzabal como su «número dos», tal y como publicó ABC el pasado sábado, procurando un «mandato de unidad» al frente del PP vasco y sin grandes novedades: «Este es un partido que tiene muy claras sus ideas, no creo que hacer grandes innovaciones. Recibo un gran legado», ha recalcado en una comparecencia junto con Basagoiti, quien por motivos personales ha puesto fin a 18 años de político para emprender otra etapa profesional en Latinoamérica.

El respaldo en bloque de los miembros de la junta directiva regional del PP vasco, reunidos esta tarde en Bilbao, otorga a Quiroga la «legitimidad suficiente» para liderar el partido, según ha afirmado la nueva presidenta del PP.

De esta forma, aplaza, si bien no descarta, la decisión de convocar un futuro congreso extraordinario en el que las bases puedan ratificar el acuerdo de la junta. Preguntada sobre esta cuestión, Quiroga ha asegurado que la celebración de un cónclave regional «es lo ideal», pero que el partido abordará ahora con mayor tranquilidad «el momento» idóneo. Como ya adelantó este diario, la cúpula de la formación pretende abrir el congreso al voto de todos los militantes, permitiendo otras candidaturas.

Quiroga se ha marcado como principales retos del PP vasco el seguir profundizando en «la libertad y la pluralidad del País Vasco», avanzado siempre con la «memoria» de la «historia de terror» vivida tras medio siglo de ETA. Pero también ha prometido «volcar» a los suyos para dar respuesta a las necesidades de los ciudadanos ante la crisis.

A sus 39 años, y tras veinte de militancia, la hasta ahora portavoz se convierte en la segunda mujer en liderar el partido en el País Vasco, tras la también guipuzcoana María San Gil. Antes que ellas estuvieron Jaime Mayor Oreja y Carlos Iturgaiz. Sus primeras palabras han sido de «agradecimiento» a sus compañeros por la confianza depositada, en especial a Antonio Basagoiti, de quien ha dicho «recibo un gran legado» y «un listón muy alto». «Presidir este partido es un reto y un honor», ha concluido la nueva líder de los populares vascos.