Suscríbete
Pásate a Premium

El bar de Mou

Un toque, dos toques, tres toques

«A ver si ahora el señorío va a ser taparse con un esparadrapo el número '15' para no ofender a quien tenga menos. Somos el país de la envidia igualitaria, y, dada nuestra alma envidiosa, habrá que apencar con la pena que en estas circunstancias supone convivir con el rey del mambo»

123 años del Real Madrid

Simeone, durante el partido de Champions ante el Real Madrid Ignacio Gil
Ignacio Ruiz-Quintano

Esta funcionalidad es sólo para registrados

Pasó el Madrid, como estaba escrito, y el circo mediático se quedó cantando un toque, dos toques, tres toques, la Champions es un toque que se me escapó, con la música de un globo, dos globos, tres globos, aquella fantasía televisual de María Luisa Seco ... y sus cuentos para la infancia, infinitamente más entretenidos que los cuentos para la merma de Carlos Martínez y su escuela de sirenas, con los 'madridistas' Valdano y Morientes defendiendo la 'mano natural' en el área de un tipo que manotea, cortándolo, un balón centrado, porque Mateu, que es como el padre Mundina del arbitraje, y ha visto su nicho de mercado en la revisión de los estudios anatómicos de Leonardo da Vinci, así lo predica.

Artículo solo para suscriptores

Esta funcionalidad es sólo para suscriptores

Suscribete
Comentarios
0
Comparte esta noticia por correo electrónico

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Reporta un error en esta noticia

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Muchas gracias por tu participación