Suscríbete
Pásate a Premium

Desde la orilla

Quizás, solo quizás

«Un domingo me senté a pensar en mi semana y descubrí que no recordaba nada»

Por eso aún existe la poesía

David Foster Wallace, durante el discurso de graduación que pronunció en 2005 en Kenyon College (Ohio)
Bruno Pardo Porto

Esta funcionalidad es sólo para registrados

Un domingo me senté a pensar en mi semana y descubrí que no recordaba nada. La amnesia es preocupante cuando tienes resaca, pero mucho más cuando no la tienes. Si me he portado bien, ¿dónde está mi memoria?, me preguntaba. Y después: ¿con quién estoy ... hablando? Los días no se habían esfumado, pero se parecían tanto que eran indistinguibles, como el dinero de la felicidad cuando no tienes ninguna de las dos cosas: todo es humo. Así que no había lunes o martes o miércoles, sino una acumulación de horas de trabajo y móvil, solo eso, un saco de horas con las que se podía llenar una hoja contable, tal vez una agenda, pero no una semana, mucho menos una biografía.

Artículo solo para suscriptores

Esta funcionalidad es sólo para suscriptores

Suscribete
Comentarios
0
Comparte esta noticia por correo electrónico

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Reporta un error en esta noticia

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Muchas gracias por tu participación